¿Le ha ocurrido que la mayor parte del tiempo se la pasa “corriendo” de una actividad a otra; se ve involucrado en muchas tareas que no hace bien o peleando con usted mismo porque su cabeza ya no le da para resolver? Si ha notado que esto le pasa “más seguido”; este ritmo de vida le está generando más perjuicios que beneficios, entonces ha pasado por su cabeza la fantasía de “dejar todo, irse a donde no haya problemas, abandonar sus actividades y buscarse otras”. Si esto le acontece, es momento de hacer algo distinto, pero no tan drástico como “botar todo”. Aunque esta es una idea bastante usual y esperada, lo que dice la “sabiduría popular: los problemas, complicaciones y ‘demonios’ te seguirán a donde vayas”.
Tomando en cuenta todo lo anterior, valdría la pena comenzar a hacer cambios viables y eficientes, como realizar pausas físicas y mentales a lo largo del día. Algo tan práctico y sencillo como “parar, detenerse”, puede traer beneficios que impacten de manera favorable, por ejemplo:
¿A usted le gustaría aprender a hacer pausas conscientes? Si es así, comuníquese a nuestra línea de atención psicológica gratuita: 800 911 32 32, disponible las 24 horas.